Para mis lectores, cómplices, y amigos.

Busco compartir años de poesía aprendizaje, vicios y expectativas dejando libre la interpretación final.
Haciendo que la poesía se mueva y nos vaya mostrando algunas cosas que aún persisten en nuestra memoria. Ando en busca de poemas que no mueran, que me desafíen pero lo más importante que me brinden aprendizaje.
Como verán tarea nada fácil, pero confío que este dialogo abierto entre ustedes y yo dará frutos.
Bienvenid@s
Natalia Correa.

jueves, 21 de noviembre de 2013

Una página

La  intrusión de  una página
con la  firme  promesa
 de  volver  con lentitud
a enraizarse,
de  sentirse a   tanto  viento,
y recordarse  como sombra  y música.

siente el árbol
su paciencia  vegetal
atraviesa  su refugio
transforma su piel  rugosa
en paisajes que rompen toda profecía.

mira  la  sangre del otro,
siéntela tuya
no dejes que corra desmesuradamente
es tiempo  de quemar  las  naves
es  deber  no rendirse  todavía.

conoce las  estrellas  y  su  brillo  poderoso,
el arrullo de la lluvia
que se enrosca  en  tu  oído
ante un dolor conocido
justo  ahora .

Recordar, recorrerse
en  ese  andar que se  pierde,
y sin embargo  se clava,
ante  la  turbia insistencia
que esta por dolerse  todavía, 
sin embargo,  la idea  del  fuego
la idea  del juego,   trae  a las bestias  consigo.

No  doy  tregua a   nadie,
incluso yo me pierdo
me desdibujo.

Soy piedra, abecedario  y laberinto,
a  veces pájaro de fuego,
ponzoña  donde  fundar ciudades
tierra  firme  y desnuda.

Cada  nudo es n una  pasión calcinada
por eso no  arranco  de  tus brazos
mi  brújula   casi animal
porque la  vida  me arrastra
me rompe, si me rompe
pero por ahora  me pertenece.

no olvido el vicio 
que por  tu boca  se  conoce,
y por  tu  lengua   se  desata,
palabras  hechas  pedazos,
aparecen  y golpean
en este  universo tan injusto  y  carnicero.

Natalia Correa.