Para mis lectores, cómplices, y amigos.

Busco compartir años de poesía aprendizaje, vicios y expectativas dejando libre la interpretación final.
Haciendo que la poesía se mueva y nos vaya mostrando algunas cosas que aún persisten en nuestra memoria. Ando en busca de poemas que no mueran, que me desafíen pero lo más importante que me brinden aprendizaje.
Como verán tarea nada fácil, pero confío que este dialogo abierto entre ustedes y yo dará frutos.
Bienvenid@s
Natalia Correa.

jueves, 30 de mayo de 2019

El viento tiene nombre (Salamandra Blues)




“We all got to die
But some people
Some people
Some people got to suffer before they die
This about a man
He's gonna be crucified
Some people die of cancer
Some people die of AIDS
But this man's gonna be crucified
Woke up this morning
In a deep deep
a deep sleep”
Resurrection Blues de Otis Taylor

Escapar es  juntar los  hilos  de la   vida  y correr,
dejando que el sudor  recorra   tu cuerpo,
buscar  simetría  al infierno
dejar  de respirar  en un  latir violento.

 El viento  afilado hoy busca su espacio, 
 hoy tiene tu nombre: papá,
en boca de todos nuestros  muertos,
alguien más   te nombra
como fruto en lumbre  vivísima
como pan  caliente que con la poesía
nos  viste ante  la orfandad.

Papá.. que encarnas en el cosmos
con  un piano,
que sigues leyendo  libros 
escritos  con tinta roja,
que ahora  repites en mis  labios,
que tiñes  turbulentos escollos
 y mágicos  líquenes  con tu  ausencia.

Mientras  tanto yo  avanzo entre horas  y  tinieblas,
sin ser   débil  he conocido  la fragilidad,
mi piel   hecha  jirones  por soñar  y ser distinta,
te extraña  te llama
pero la vida  sin ti es un desierto,
una  llanura  extensa  y peligrosa.

Papá  tu sonido sobrepasa la muerte,
tus pies aún me sirven para andar
y en tu  palabra hoy  habita  la libertad,
hoy te vuelves  estructura profunda,
que sonríe  a caída libre,
 que  dialoga de manera  liquida
dentro  de una lenguaje  sonoro.

1, 2 y tres  por ti,
 que  estás   en  la   lluvia  y  sus   andanzas
 incluso  en el error  y en la violencia  del  agua,
 1, 2 y tres  por ti,
 que  estás  recostado  al sol
sofocando  la tristeza
 que  aún queda  entre los  ojos.

 Feroz y trasparente te vuelves viento,
y hoy  tu  nombre  no se muere,
y así la  angustia de ayer  nos conmueve,
mientras  la noche trae indicios  de tu  compañía,
sabes  que no tengo nada más  que tu nombre,
cortado en finas   hojas  de papel 
entre origami y cubos de hielo,
a  veces   me da  frio  a veces  me da miedo 
y otras  tantas  no lo  entiendo.

Cuando te  pienso surgen   en mí
palabras   endiabladas de  círculos   perfectos,
 3.14. 16…..
lecturas  infinitas  que debelan las  absurdas fronteras,
que hoy conocemos,
 voy a  la raíz como por  el mundo,
quizá mientras  la   tristeza me  golpea
un blues  suena y suena…

Cuantos   como nosotros: ágiles ingrávidos, desprovistos,  lacerados, rotos, inconclusos
sueñan  en tomar carretera,
porque ahora no hay otra  manera  de encontraste
más que por el viento que viaja  y  hondea,
tu nombre través  del tiempo. 
Papá.



 Salamandra  Blues  Diario de  viaje
Natalia  Correa.