Para mis lectores, cómplices, y amigos.

Busco compartir años de poesía aprendizaje, vicios y expectativas dejando libre la interpretación final.
Haciendo que la poesía se mueva y nos vaya mostrando algunas cosas que aún persisten en nuestra memoria. Ando en busca de poemas que no mueran, que me desafíen pero lo más importante que me brinden aprendizaje.
Como verán tarea nada fácil, pero confío que este dialogo abierto entre ustedes y yo dará frutos.
Bienvenid@s
Natalia Correa.

sábado, 29 de noviembre de 2014

SOY UNA MUJER FÁCIL DE OLVIDAR.



“I, I will be king
And you, you will be queen
Though nothing will drive them away
We can be Heroes, just for one day
We can be us, just for one day"

Soy una mujer  fácil de  olvidar
porque no dejo cabos sueltos,
ni tampoco amarras,
borro cada huella,
desato cada estrella
y las dejo  caer  como caballos  salvajes,
como  hormigas ardientes,
te devuelvo tus ojos,
el cuervo que soy
me ha devorado
tantas veces desde entonces.

 Soy una mujer fácil de olvidar,
entre  amor y cuchillos  afilados,
 justo porque he dejado de escribir,
 para darte el  silencio que en mi ausencia  necesitaras,
te  he enseñado a  odiarme un poco,
te he dado música suficiente,
para  cubrir  mí rastro
por si volviera aparecer.
tus partituras fueron mis manos
y mi oído era  tu música

Pero ahora, pareces más  fuerte que yo.
me desarmo y  sangro tal vez,
me abandono  y grito
también soy feliz,
guardo  todos  mis  gestos
 y los  tiro al mar,
dejando atrás  la solución acuosa  de la tristeza,
te doy lágrimas profundas hasta  vaciarme
por si el sol quema  y el agua ahoga.

Busco  ocultar lo más  íntimo
para que tu memoria no lo recuerde,
y no extrañes  el relámpago
ni persigas la luz,
porque  eso duele

 Soy una mujer que no sabe de   citas,
 ni tiempos  perfectos,
que habla  de más,
mientras  se emborracha  de poesía,
que le duelen  sus  muertos
 tanto como sus  huesos,
me escondo
en los   versos  de Alejandra,
brindo con David Bowie
cuando las  noches son muy largas
y cuando  la violencia  me amedrenta
Víctor Jara me sostiene,
María Gabriela sabe  cuánto te quise,
Calamaro cuanto te hubiera querido,
Miles, Miles,  forever  you.
Pink Floyd le abona a  mi soledad
Los  acordes  necesarios,
John, Paul,  George   incluso Ringo
han ido guardándolo todo,
para cuando   seamos  solamente una isla
donde se pueda soñar.
Salamandra  blues es  nuestro  diario de  viaje,
nuestro aguijón maestro,
para envenenar la mala música
que  habita nuestro tiempo.

Soy una mujer   fácil de olvidar
justo por mi silencio
soy una mujer  fácil de olvidar
Porque así lo quise yo.

Natalia  Correa.


viernes, 10 de octubre de 2014

Un diario de viaje



«La belleza es aún más difícil de explicar que la felicidad.» Simone de Beauvoir

Dedicado  a  Paola  Meneses
La  cicatriz es
un cuerpo  aéreo
un diario de  viaje,
donde puede  habitar
 el silencio de los años,
un rastro de dolor intangible
donde la piel
se crispase cuece, y se oculta,
la luz siempre cicatriza
en un borde de oscuridad
un poema
que circula  en cuerpos incendiados,
en un golpe, en un  sólo golpe
una lagrima
de  agua indeleble,
un corazón
de tinta china,
una historia
sobre un tatuaje en construcción
mientras  la vida  circula  algo se queda,
quizá un fardo caliente,
u oro genuino que da  brillo a  nuestros  ojos,
oculto la belleza: 
de algunos de  mis dedos,
de mi rostro,
por ahora desprovisto y desnudo
 y lo hago cicatriz
 doy  otro nombre a mis talones,
  y los hago  cicatriz
 respiro,
 y dejo atrás el hoyo en mis pulmones
 y lo hago  cicatriz
 ese jugueteo cerca  mi boca,
 como cuchillada
 lo hago cicatriz,
las huellas  en mi cráneo
son  como un mapa  marino
de cada uno de mis  intentos,
ahora las cuento
para conciliar  el sueño,
y conceder fuerza al mundo,
en tiempos  de muerte y  soledad.

Natalia  Correa.
Hidden_Beauty_by_Windcharmer


lunes, 15 de septiembre de 2014

Sirena Negra (Nota perversa #2)

La distancia  entre la boca y el espasmos es muy leve
se encadenan  en el fruto del deseo nuestras bocas
te desnudo
 y  te miro frágil y transparente,
tu piel me llama por mi nombre,
mientras la punta de mis   dedos te recorre,
convulsa  fragancia que de mezcla a  nuestro roce
abres un mundo entre la húmeda promesa,
 y todo tiembla,
todo se hunde
todo es deseo.

Un océano mi vientre,
compases eléctricos se generan en tu cuerpo,
adentro la  tibieza inunda,
aquello que se nos escapa
una fiebre tersa,
un calor intenso.

Insisto apasionadamente sobre el  contorno de tus orillas,
ahogo mis  palabras en tu insistencia,
 tiemblo
mientras los líquidos sabores se fermentan,
me yergo veloz y húmeda  hacía tí
cabalgo sobre tus  párpados  audaces.

Mi lengua intrincada y felina
se pasea te sumerge
un aliento perverso y cómplice
oscilando  aquel  deseo,
 concediendo un grito desde las  entrañas,
lamiendo este líquido amor de  recóndita intimidad.


Foto- Edición- Poema  Natalia Correa.

martes, 19 de agosto de 2014

Sirena Negra… El Lector



Busqué ser  arpegio  y  sin embargo,
abrí tus  heridas,
de ellas  manaban palabras incomprensibles,
un instante en ebullición tuve  tus ojos,
 en un plácido  instante conocí tu cuerpo.

Tú que por  ahora deambulas inocente,
sabes  que nuestro encuentro  se vuelve
tierra  firme de  dientes  blandos,
un mundo tranquilamente húmedo,
que no sabe  sus  alcances
tan sólo se presiente.

Los  días  se hacen  largas  noches,
vamos  trasnochados  como serpientes,
busco  cambiarte el nombre
darte palabras en trinchera de fuego,
 una imagen  que lleva   sólo resplandor
 un tatuaje que se esparce solo
en el río  de la vida.

Puede que tu dolor no lo note nadie,
puede que tu epidermis  se hunda,
 y que las  señales mueran al caminar,
sin embargo, una flor  se  abre
cuando  tus ojos  me recorren.

Llevo una versión de tí  tan  silenciosa,
que apenas  y puedo  pronunciarte,
en un minuto se desnuda  la memoria
y entonces  salta en llamas.

Lector  tú eres  mi refugio,
tú eres  mi aliento,
pero también  la mariposa  negra
que  anuncia  mi muerte,
y viene a mi encuentro.